El H. Ayuntamiento en coordinación con la Casa de Cultura invitan a su huapangueada que se efectuará los días 30, 31 y 01 de Agosto, contando con la participación de tríos, trovadores, versadores y bailadores de distintos puntos de la República.
La primera vez que estuve en Tamalín todo era nuevo, estaba a menos de 3 horas de mi casa y la gente era diferente, el paisaje era otro. El clima igual de caluroso y húmedo, eso sí.
El trayecto en coche no representa mayor dificultad que la de un camino de terracería promedio, a menos que sea temporada de lluvias, dicen es una comunidad anegada entonces. Y la carretera Tampico- Naranjos, Ver. pues no es mucho peor que otras del norte de Veracruz.
Apenas llegué a la plaza del pueblo me dispuse a buscar a mis amigos periodistas, quienes reportarían desde la tradicional huapangueada a celebrarse en éste lugar; para romper el hielo le invité un bon-ice a un tal Juan Pablo Castillo, tenía facha de periodista y seguro me ayudaría en mi encuentro, demorado ya en parte porque resulta que Tamalín no es territorio Telcel.
No me equivoqué, Juan Pablo Castillo, sabiondo musical en cuanto a huapango se refiere, me llevó hasta casa del profesor Luis, amable tamalinense que brindó alojamiento a los foráneos, y no fue el único por supuesto, todo el comité organizador lo hizo y también hubo alegres espontáneos que esa noche bajo las carpas de Corona y Modelo ofrecían techo.
La huapangueada de Tamalín dura tres días, pueden ser jornadas tan intensas o tan relajantes como prefieras: rituales indígenas, sones tradicionales, talleres de versería y jarana o de artesanía en palma, zacahuil, asados, quesos y cervezas. Y lo más importante: la música y el baile.
Una vez con los amigos localizados y además superado el miedo a no saber qué me deparaba un lugar extraño aquello fue una fiesta, acostado en el pasto de la plaza, escuchando El Querreque, comiendo en casa del Dr. Eusebio Nicanor (organizador del festival) y divertido con improvisaciones desde el patio o en la misma mesa, en casa de doña Esperanza Zumaya bebiendo cerveza –y comiendo otra vez-, frente a la tarima atento al programa, zapateando para poder seguir despiertos y escuchando ese ritmo que también es música, buscando zacahuil a las 2am con un grupo de recién conocidos, durmiendo a deshoras y contento.
Desde el 31 de julio y hasta el dos de agosto transcurrirá la huapangueada de este año, si quieres, si puedes, si no ya lo verás…como dice el son.
Tamalín: Ubicado en la zona norte del Estado. Limita al norte y noroeste con Ozuluama, al este con Tamiahua, al sur con Tancoco, Naranjos Amatlán y Chinampa de Gorostiza.
El trayecto en coche no representa mayor dificultad que la de un camino de terracería promedio, a menos que sea temporada de lluvias, dicen es una comunidad anegada entonces. Y la carretera Tampico- Naranjos, Ver. pues no es mucho peor que otras del norte de Veracruz.
Apenas llegué a la plaza del pueblo me dispuse a buscar a mis amigos periodistas, quienes reportarían desde la tradicional huapangueada a celebrarse en éste lugar; para romper el hielo le invité un bon-ice a un tal Juan Pablo Castillo, tenía facha de periodista y seguro me ayudaría en mi encuentro, demorado ya en parte porque resulta que Tamalín no es territorio Telcel.
No me equivoqué, Juan Pablo Castillo, sabiondo musical en cuanto a huapango se refiere, me llevó hasta casa del profesor Luis, amable tamalinense que brindó alojamiento a los foráneos, y no fue el único por supuesto, todo el comité organizador lo hizo y también hubo alegres espontáneos que esa noche bajo las carpas de Corona y Modelo ofrecían techo.
La huapangueada de Tamalín dura tres días, pueden ser jornadas tan intensas o tan relajantes como prefieras: rituales indígenas, sones tradicionales, talleres de versería y jarana o de artesanía en palma, zacahuil, asados, quesos y cervezas. Y lo más importante: la música y el baile.
Una vez con los amigos localizados y además superado el miedo a no saber qué me deparaba un lugar extraño aquello fue una fiesta, acostado en el pasto de la plaza, escuchando El Querreque, comiendo en casa del Dr. Eusebio Nicanor (organizador del festival) y divertido con improvisaciones desde el patio o en la misma mesa, en casa de doña Esperanza Zumaya bebiendo cerveza –y comiendo otra vez-, frente a la tarima atento al programa, zapateando para poder seguir despiertos y escuchando ese ritmo que también es música, buscando zacahuil a las 2am con un grupo de recién conocidos, durmiendo a deshoras y contento.
Desde el 31 de julio y hasta el dos de agosto transcurrirá la huapangueada de este año, si quieres, si puedes, si no ya lo verás…como dice el son.
Tamalín: Ubicado en la zona norte del Estado. Limita al norte y noroeste con Ozuluama, al este con Tamiahua, al sur con Tancoco, Naranjos Amatlán y Chinampa de Gorostiza.
1 comentario:
AYER FUI Y ME GUSTO MUCHO!! RECOMENDABLE
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