De repente y no casualmente aparecieron grabaciones por todos lados..

De repente y no casualmente aparecieron grabaciones por todos lados. Al escándalo Veracruz, ahora sumémosle Puebla y Oaxaca. El caso poblano, en caso de comprobarse, de nuevo desnuda a un gobernador que lleva años de gracia. La presunta conversación que sostiene con una joven mujer recuerda inevitablemente los tiempos no lejanos y no aclarados sobre su relación con Kamel Nacif. El caso de Oaxaca presenta al gobernador Ulises Ruiz hablando de cómo distribuir boletas electorales. En los tres casos las irregularidades denunciadas tienen como común denominador la ilegalidad de quien grabó. Se dirá que todo vale en función de la importancia de la denuncia que se hace, pero lo cierto es que no hay nada nuevo que no se suponga que hace más de algún gobernador y la propia Presidencia. La importancia de estos casos es que se presentan presuntas evidencias, habrá que ver hasta dónde llega todo esto. Las preguntas son: ¿quién grabo y qué hacer con el contenido de lo que se grabó? El "cochinero" está echado a andar. Unos y otros traen una cola mayúscula que les pisen, incluyendo la cínica declaración del joven Nava del PAN, quien asegura que hay que sacar a los "señores feudales". Ni a quién irle, ¿cómo la ve?