Periódico La Jornada
Miércoles 30 de junio de 2010, p. 35
La tormenta tropical Álex se convirtió anoche en el primer huracán de la temporada en el Atlántico; avanza hacia la frontera de México con Texas y se espera que toque tierra en las primeras horas del jueves.
Los municipios de Matamoros y Nuevo Laredo, Tamaulipas, y Pánuco, Veracruz, se declararon en alerta. Autoridades del primer municipio preparaban el desalojo de 5 mil familias de las zonas bajas de la ciudad, donde hay 117 colonias en riesgo grave de inundación.
El meteoro, de categoría uno en la escala Saffir-Simpson, se ubicaba 315 kilómetros al este-suroeste del municipio de Soto La Marina, Tamaulipas, con vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora, y se movía hacia el oeste a 15 kilómetros por hora, informó el Centro de Huracanes de Estados Unidos.
Tras pasar por Campeche, aún como tormenta tropical, Alex dejó más de mil viviendas dañadas, unos mil 100 damnificados por inundaciones y el desplome de dos puentes arrastrados por las corrientes de agua, que mantienen incomunicados a más de mil habitantes de dos comunidades.
En Oaxaca, el meteoro causó la muerte de una persona y el desbordamiento del río Ostuta, que inundó decenas de viviendas de tres municipios del Istmo de Tehuantepec.
Por segundo día consecutivo, más de 160 mil alumnos de todos los niveles educativos en Campeche siguieron sin recibir clases como medida preventiva, debido al movimiento errático y la poca velocidad de desplazamiento de Álex (siete kilómetros por hora). Las actividades escolares se reanudarán este miércoles.
Los mil 100 damnificados que dejó el fenómeno meteorológico en los municipios de Champotón, Escárcega, Carmen, Calakmul y Candelaria se alojaron en 11 albergues, donde elementos del Ejército que aplican el plan DN-III les proporcionan atención médica y comida.
Las zonas más afectadas son el municipio de Champotón, con al menos 600 damnificados y daños graves en 908 viviendas, y Sabancuy, municipio de El Carmen, donde se desplomaron los puentes que comunican los poblados Cobal-Chicbul y Checubul, por lo cual sus habitantes se encuentran aislados.
El jefe operativo de la Instituto Estatal de Protección Civil de Oaxaca, César Narváez, informó que los aguaceros de esta semana reblandecieron un muro de contención de un arroyo, en la colonia Santa Anita de la capital del estado, el cual se desplomó sobre la casa de Reyna Ramos Vásquez, de 23 años, quien estaba dormida y falleció.
En el Istmo de Tehuantepec, donde entre la noche del lunes y la madrugada del martes se registró una precipitación pluvial de 305 milímetros, el río Ostuta se salió de cauce e inundó decenas de viviendas en 13 poblados de los municipios de San Francisco Ixhuatán, San Francisco del Mar y Juchitán de Zaragoza.
Las autoridades de San Francisco Ixhuatán, donde unas 200 personas resultaron damnificadas, abrieron dos albergues en la casa de la cultura y el auditorio.
En Yucatán, Álex destruyó viviendas de madera, paja y lodo de unas 30 familias mayas en los poblados Tigre Grande y Sacbekán, municipio de Tzucacab. Partes de estas comunidades indígenas marginadas quedaron inundadas y varios árboles cayeron.
Julia A. Le Duc, Carlos Figueroa, Andrés T. Morales, Lorenzo Chim, Octavio Vélez, Agustín Galo, Hiram Moreno y Luis A. Boffil, corresponsales, Reuters y Notimex
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