Orizaba, Ver.- Miguel Ángel Yunes Linares, Javier Duarte de Ochoa y Dante Delgado Rannauro son candidatos que se han mostrado insensibles ante los problemas laborales. Yunes Linares y Dante Delgado son calificados como represores laborales, mientras que Duarte de Ochoa es cómplice del gobierno federal al callar ante el desconocimiento del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), declaró Jorge Cruz Ibáñez, presidente de la agrupación Ricardo Flores Magón.
El entrevistado planteó que el futuro gobernante de Veracruz será insensible a las demandas de los trabajadores debido a sus antecedentes: “es necesario cuestionar a los candidatos a la gubernatura de Veracruz y saber cuál es su postura ante esta represión de la clase trabajadora. ¿Éstas serán las medidas para resolver los problemas laborales que se espera en Veracruz por parte del futuro gobernador? Porque hay que recordar que uno de los candidatos ya fue gobernador, como sucede con Dante Delgado Rannauro, y utilizó la fuerza pública en Ciudad Mendoza contra los textileros de la Compañía Industrial Veracruzana y también a los taxistas de la ciudad de Orizaba. A Miguel Ángel Yunes Linares se le recuerda como un represor en sus tiempos en que fue secretario de Gobierno, con Patricio Chirinos. Javier Duarte de Ochoa guardó silencio cómplice cuando todavía era diputado federal en el caso del Sindicato Mexicano de Electricistas; ahora hay que preguntarle cuál es su opinión respecto al desalojo violento de los mineros de Cananea y de Pasta de Conchos.
”En este sentido de los derechos laborales no hay ni a quien irle, los tres candidatos a gobernador representan los intereses de clase, no hay garantía de que en el sexenio que sigue en el estado de Veracruz les sean respetados los derechos de los trabajadores.
”Esta represión es una constante del gobierno de la República. Felipe Calderón se conduce como agente del capital, más que como Presidente de la República, ha llegado al grado de violentar los más elementales derechos constitucionales de las clases trabajadoras en el afán de congraciarse y beneficiar al capital nacional y transnacional.
”La mancuerna compuesta por Felipe Calderón y Javier Lozano Alarcón, secretario de Trabajo y Previsión Social, ha hecho sentir su odio que tienen sobre la clase trabajadora del país. Sus acciones así lo demuestran, en el caso de Luz y Fuerza del Centro (LFC) y del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), primero intentaron sabotear al SME, negándole la toma de nota al Comité Central que encabeza Martin Esparza y al no tener elementos para lograrlo, sin mayor trámite declaró la extinción de Luz y Fuerza del Centro con el objeto de ponerla en manos del capital privado, violentando gravemente la Constitución.
”La respuesta de Felipe Calderón como presidente de la República hacia las demandas de los trabajadores nos recuerda a los Mártires de Río Blanco de 1907, que ante la explotación de que eran objeto en las fábricas textiles en la región de Orizaba, los obreros de aquella época se dirigieron a Porfirio Díaz para plantear sus demandas y como respuesta fueron brutalmente reprimidos por las fuerzas de los rurales de aquella época, hoy serían las de Seguridad Pública, quienes hicieron una matanza de trabajadores, así actúa el gobierno de Calderón, como en los tiempos del porfiriato. Cómplice del capital y represor de los trabajadores.
”En próximos días la opinión pública del país estará centrada en el mundial de futbol, tiempos peligrosos, porque ante un hombre como Calderón todo puede suceder, habrá que estar atentos sobre sus acciones. Ojalá que pasada la euforia del Mundial, no nos encontremos con amargas sorpresas que afecten nuestra vida nacional y personal”.
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