martes, 24 de mayo de 2011

Lo que todo ciudadano debería saber sobre Enrique Peña Nieto

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1) El Enrique Peña Nieto que hoy conocemos se forjó cuidadosamente desde pequeño. Quienes lo conocieron de niño lo recuerdan como alguien obsesivamente preocupado por su imagen, su peinado, su ropa. Siempre usó el copetito, si acaso más parado, en las fiestas.

2) Ya a los 13 años de edad, cuando la profesora preguntó a los alumnos qué querían ser, respondió: “Yo voy a ser gobernador del Estado de México”.

3) Siempre asistió a colegios religiosos y se graduó en la Universidad Panamericana, institución educativa del Opus Dei, con una tesis titulada El presidencialismo mexicano y Álvaro Obregón. Entre las dedicatorias estaba una a su tío, Arturo Montiel: “Por su ejemplo de tenacidad y trabajo”.

4) Cuando era diputado local se le acercó a otro diputado del PRD y le dijo que estaba desesperado: “Mi mujer me quiere acusar con el gobernador Montiel”, porque “andaba de mujeriego”. Reconoce que sus infidelidades son una debilidad que arrastra desde muy joven. Tuvo dos hijos fuera del matrimonio. Uno murió de cáncer; el otro vive.

5) En una ya famosa entrevista con Jorge Ramos, cuando el periodista le pregunta cómo murió su esposa, Mónica Pretelini, Peña Nieto contestó lo siguiente: “Mira, pues en su momento se dio la explicación. Fue algo (…) intempestivamente. Ella llevaba dos años de tener alguna enfermedad (…) parecida a lo que era (…) estertores, este… (hace un ligero ademán de frustración con las dos manos) Eeh… se me fue el nombre de la… de la… de la enfermedad puntual.

“–¿Epilepsia?

“–¿Epilepsia, pero no era epilepsia exactamente, pero era algo parecido a la epilepsia.”

6) Una crónica de sus giras por el Estado de México lo describe así: “Y abraza. Y posa. Clic. Contento, acaricia, escucha, promete, encarga, encomienda, transmite. Consuela, tranquiliza, apapacha, se deja, alborota melenas, acaricia niños de brazos que le ofrecen sus madres, los besa, va y viene, anda y desanda, agita brazos y manos, seca su sudor, bebe un vaso de agua, se alza sobre las barreras, rompe fronteras. Y luego se hinca frente a una anciana. La escucha reverente. Como si escuchara cuitas y penas y faltas y anhelos. Da oído a los sufrientes. Atiende a la anciana. El cerco se ensancha. ¡Hasta los guardaespaldas toscos se hacen a un lado!” La crónica retrata el universe de Peña Nieto y el contexto fácil, cómodo y adulatorio que lo ha acompañado en su camino a Los Pinos.

7) Sus críticos señalan que sus “500 Compromisos” (firmados ante notario) no son logros tan importantes ni tan sustanciales. Argumentan que la mayoría son obras que ya estaban previstas antes de que llegara al poder, y muchas son pequeñas: un puentectito por aquí, unas lucecitas por allá. En los primeros cuatro años, el Estado de México tuvo un presupuesto de 600 mil millones de pesos y el gobierno destinó 13 mil millones de pesos a obras, sólo 2%. Muchas han sido construidas con concesiones otorgadas al sector privado hasta por 30 años.

8) Las mujeres han jugado un papel crucial en la construcción de su candidatura presidencial. Actrices que han prestado su imagen al gobierno del estado, mujeres que gritan en mítines de campaña: “¡Peña Nieto, bombón, te quiero en mi colchón!”; mujeres que son su reserva de votos; mujeres que lo convierten en el objeto inalcanzable del deseo. Según la escritora Sabina Berman, “Peña Nieto causa una tensión erótica, de envidia y de ganas de acercarse a la vez. Es una figura erótica tanto para mujeres como para hombres”.

9) Las mujeres son también, paradójicamente, su flanco débil: el Estado de México es el lugar más peligroso en el país para ser mujer actualmente. Según la Secretaría de Salud federal, 2 mil 673 mujeres fueron asesinadas en territorio mexiquense entre 2000 y 2009, cifra que rebasa cualquier índice nacional, incluyendo Ciudad Juárez. En respuesta, la Procuraduría General de Justicia del estado entregó un reporte donde achaca el fenómeno del feminicidio a la conducta de las mujeres: “Consumen drogas, alcohol o usan inhalantes; trabajan en bares en los que alternan con los clientes; salen solas a altas horas de la noche. Se involucran con varias parejas a la vez; forman parte de bandas jóvenes; forman parte de grupos delictivos o sostienen relaciones con miembros de los mismos”.

10) La esencia de la estrategia de Peña Nieto es la presencia constante en la televisión, mediante oleadas de propaganda pagada, transmitida bajo el disfraz de información de interés público. No importa que haya una ley que lo prohíba; el gobernador ha encontrado la manera de violar la legislación electoral sin siquiera recibir sanción por ello, como lo demostró el fallo reciente y cuestionable del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Hay un Plan de Trabajo –puesto en marcha con Televisa– que incluye diseño e investigación de opinión pública, asesoría política, manejo de crisis, estrategia de comunicación, e inundar los hogares que encienden la televisión con el rostro de Peña Nieto.

11) Desde el primer momento, su gobierno ha estado en manos de asesores que los líderes reales de la política mexiquense, incluido Arturo Montiel, le han proporcionado. Cuando difundió la lista de los miembros de su gabinete, estaba llena de cuadros alineados con Montiel u otros miembros del Grupo Atlacomulco.

12) Para gobernar, él sigue el guión. Es un político rígido, poco hábil para improvisar, debatir, hacer lo que no tiene anotado enfrente. Sigue el script y no se sale de él. Como sugiere el panista Francisco Gárate: cuando se sale del script resbala. Por eso se lo tienen prohibido. “Es muy cuidadoso con eso. Hay que reconocerle que es muy obediente, muy disciplinado. Los asesores son todo para él”. No improvisa. Es un político de escenarios preparados y controlados.

13) Según Carlos Salinas de Gortari, Enrique Peña Nieto representa “una nueva generación de políticos que encabezan la recuperación del PRI”, y ve en él “la misma vitalidad” que él tenía.

14) Le gustan los grupos ochenteros como ABBA, las canciones románticas de Celine Dion; mata por unas quesadillas; usa relojes Victorinox Swiss Army y loción de Carolina Herrera; prefiere los productos de Clinique para el cuidado del rostro y la piel, y Un ángel enamorado es de sus películas favoritas.

15) Su mayor activo es la maquinaria del PRI armada detrás de él. Es un muy buen operador de la política y está entrenado y educado para gobernar a la manera priista del siglo XX. No tiene un discurso hacia el país, no tiene una ideología o un proyecto claro, más allá de llegar a la presidencia. Su narrativa, según Sabina Berman, es la de un personaje “muy bonito, telenovelero y muy atractivo” que manda el siguiente mensaje: “existen un hombre guapo y una actriz famosa que están construyendo su amor y nosotros, los ciudadanos, debemos cooperar para que sean felices”. Este es Enrique Peña Nieto, delineado en un perfil escrito por Ignacio Rodríguez Reyna y publicado en el nuevo libro Los suspirantes, editado por Jorge Zepeda Patterson. Léalo y conozca mejor al “Luis Miguel de la política”, que según la encuesta reciente de El Universal/Buendía-Laredo lleva más de 20 puntos de ventaja sobre cualquier candidato a la presidencia.

(*) Este texto se publica en la edición 1803 de la revista Proceso, ya en circulación.

Denise Dresser

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