sábado, 30 de mayo de 2015

Por un voto ético, estratégico y diferenciado

Miguel Concha
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Para la ciudadanía de nuestro país ejercer el voto parece un dilema mayúsculo. Y no lo es tanto por las consecuencias que sigan de su opción al sufragar, sino más bien por lo contrario, porque en el fondo sabemos que sea cual sea nuestra decisión, no veremos cambios de importancia para los grandes problemas nacionales que preocupan de fondo a nuestra sociedad. No en balde esta certeza ha llevado a muchos a asumir una posición, respetable y respetada, de no concurrir a las urnas o de hacerlo sólo para anular el voto.
Se podrá no estar de acuerdo con esto, pero lo que tampoco se puede negar es que se trata de una forma de protesta que debe ser escuchada, porque junto con los que votan podríamos decir que bajo protesta, están expresando el hartazgo social frente a un régimen político que se quedó a mitad de camino en su tránsito hacia la democracia, y que hoy ya no es capaz de hacer frente a los problemas reales de México. A quien dude que así están las cosas, le bastará con leer el informe del Latinobarómetro sobre la democracia, en el que queda claro que de toda América Latina el pueblo mexicano, después del hondureño, es el más descontento con su democracia. Por lo anterior, múltiples organizaciones agrupadas en el Frente Amplio Social Unitario lanzaron un llamado a la ciudadanía a ejercer un voto ético, estratégico y diferenciado, aclarando que este llamado lo hacen sin deslegitimar ninguna forma de lucha electoral, como pueden serlo la abstención consciente o la anulación del voto. “Este llamado –precisan– será el inicio de la estructuración de un amplio acuerdo estratégico poselectoral”.
Se trata de llamar a la movilización para exigir a los aspirantes a ocupar los puestos de elección a comprometerse con una agenda social que ponga en el centro de la atención pública la vigencia de los derechos humanos; la participación ciudadana en los asuntos públicos; la equidad de género; el fin del control corporativo y el mejoramiento de las condiciones laborales; la defensa de la tierra, el territorio y los recursos naturales, y la reversión de las reformas estructurales. Llamar al ejercicio de un voto ético implica ir más allá de los cálculos aritméticos de los partidos políticos y reivindicar la garantía de los derechos humanos como fin de la democracia y de las instituciones públicas. Implica también exigir a las autoridades responsables evitar eficazmente la compraventa del voto, ya que se nos presentan anuncios responsabilizando a los pobres de venderlo, pero hasta ahora no hemos oído que se anuncie el castigo de alguien que lo compre, por más que se hayan presentado evidencias de que así haya sido. La exoneración es el destino de los compradores de votos, y con ello la renovación de su patente de corso, pese a las reiteradas violaciones a la legislación electoral.
El llamado al voto estratégico implica apelar al ejercicio colectivo de la inteligencia ciudadana, menospreciada por el diagnóstico simplón o la cancioncita banal. No podemos desconocer que hoy los medios se han convertido en fines y que los partidos, instrumento de la democracia, se nos presentan también como si fueran su fin, olvidando, si no es que burlándose, de que el principio de la representación es la subordinación del representante a los representados. Por ello, desde las limitaciones que la situación actual impone a la ciudadanía –recuérdese la negación del derecho a la consulta popular–, el voto estratégico es la posibilidad de forzar a los miembros del régimen político, incluidos los partidos, a caminar de nuevo hacia la democratización. Por esto se habla también de un voto diferenciado. Es un mensaje a todo el régimen político: si no hay ajustes, ya no caeremos en el juego de la partidocracia. Sabemos que los electos tomarán las decisiones, pero el criterio básico de selección es, en nuestro limitado ámbito de decisiones, a quien se comprometa con la agenda de la sociedad.
Se trata entonces no de ver qué partido hace mayor cantidad de propuestas, sino cuáles candidatas y candidatos se comprometen con las demandas de la sociedad. El compromiso tiene que ser de los partidos hacia la ciudadanía, no a la inversa. El ejercicio del sufragio es sólo una parte de la estrategia ciudadana. La otra, la más importante, es la articulación de fuerzas, tanto de los que votaron como de los que se abstuvieron conscientemente o anularon su voto, a caminar en un solo sentido: expresar con más fuerza el reclamo democrático, exigir a los electos la garantía concreta de los derechos humanos, derechos iguales para mujeres y hombres, participar en las decisiones que nos afectan, trabajar con dignidad, que la tierra nos alimente y cuidar de nuestros recursos naturales. Es la exigencia a todos los que hayan resultado electos a comprometerse con la agenda social, porque es la misma exigencia de las instituciones democráticas públicas. No es moneda de cambio para la compraventa del voto, sino delimitación del piso para discutir y reformar la vida pública del país.
Nos hemos rezagado con respecto de América Latina. Somos de las economías menos dinámicas, de las que menos proporción de gasto dirigen al desarrollo social, de los países más desiguales. Y somos también de los países con mayor violencia. ¿No exige todo esto un cambio de rumbo y de régimen político que lo conduzca? Lo anterior podría ser una conclusión a la que todos llegaran, si es que quienes pugnan por ocupar o retener las instituciones se pusieran a hacer el cálculo de que más les conviene ceder un poco para no perderlo todo. Ceder en su afán de acumulación de riqueza a costa del futuro del país. Ceder en su afán de acercarse al poder a costa de perder su identidad y su ideología. Ceder incluso en protagonismos para dar paso a las articulaciones que realmente puedan transformar al país. Tal vez esta sea la misión que hoy le toca a la sociedad civil: poner las condiciones para remprender el camino a la democracia, en un amplio acuerdo en el que ejerza su soberanía y exija a las instituciones un cambio de rumbo.

domingo, 17 de mayo de 2015

A los deVotos de Felipe Calderón... :)


Ayer a los troles panistas de @FelipeCalderon les molestó mi cartón de La Jornada; por eso lo vuelvo a poner hoy: Antonio Helguera

Ayuda al PRI: no votes

Ayuda al PRI: no votes 

Por: Jaime Avilés (@Desfiladero132)
15 de mayo de 2015.- Un politólogo está explicando en Youtube por qué no votar, anular tu voto o votar en blanco sólo beneficia a los partidos grandes. Roberto Duque subió a las redes un video para explicarnos qué hará el Instituto Nacional Electoral, la noche del 7 de junio, cuando se cierren las casillas y comiencen los conteos.
El especialista invita a suponer que los resultados darán estos porcentajes: 38% votos anulados a propósito, 2% votos anulados por error, 3% votos para candidatos independientes y 7% para partidos sin registro, lo cual suma un idílico 50%.
Acto seguido, el politólogo imagina que los partidos con registro obtienen estas calificaciones: PRI 19%, PAN 12.5%, PRD 9%, PVEM 5%, Morena 4.5 %, y los demás (MC, PT, Panal, Humanista y Encuentro) perderán el registro, al quedar por debajo del 3% a escala nacional).
¿Entonces para qué servirán los votos anulados de quienes apoyen las jaculatorias de los poetas besucones a favor del no voto? ¿A quién fustigarán con el látigo de su desprecio y orillarán al suicidio? ¿A los buitres del sistema? De ninguna manera. Duque lo expone así:
Una vez desechados los votos inútiles (que en este esquema ocupan la mitad del pastel), “parecería que a los partidos grandes les queda un pastel más chico, pero no es así. El IFE, como lo conocíamos antes, ahora INE, deberá sacar un nuevo cien por ciento a partir de los votos por esos partidos…
“En nuestro ejemplo, el partido que tenía 19% de la votación total sube automáticamente al doble. El que sacó 12.5% lo mismo, duplicará su fuerza electoral, y así sucesivamente. ¿Por qué? Porque la legilaslación distingue entre la votación total emitida y la votación nacional. ¿Qué tiene la nacional que no tenga la otra? No tengo la menor idea?”
¿Con que no? Pues Desfiladero descubrió lo siguiente: la votación total, como su apellido lo indica, es toda la que se deposita en las urnas, mientras la nacional es aquella que se califica como válida, luego de eliminar los votos que no sirven. Aclarado esto, sigamos con Duque.
“Con base en la votación nacional los partidos recibirán los siguientes tres beneficios. Uno: diputados plurinominales. Recordemos que de los 500 diputados federales 200 se entregan a los partidos a través de los listados de candidatos plurinominales. Dos: dinero público para los siguientes tres años. Tres: espacios en radio y televisión. En ninguno de estos tres casos, el voto nulo reduce el tamaño de las rebanadas del pastel, al contrario, las hace más grandes”.
Para ilustrar mejor su ejemplo, el politólogo multiplica por dos los resultados hipotéticamente obtenidos por los partidos grandes. Así, el PRI sube de 19 a 38%, el PAN de 12.5 a 25%, el PRD de 9 a 18%, el Verde del 5 al 10% y Morena de 4.5 a 9%. Esto se reflejará en reparto de plurinominales, dinero y espacio en los medios.


El sistema electoral, en otras palabras, está blindado contra los anulistas. Votes o no votes, los partidos con mayores recursos, arraigo y simpatizantes prevalecerán en la cancha del Poder Legislativo. Pero quienes tenemos claro que las cosas en México no pueden seguir como van, también sabemos que estas elecciones poco o nada ayudarán a frenar la devastación peñista.
No obstante, hay matices. Dos reformas les quedaron pendientes a los diputados que terminan su trienio: la privatización del agua y la creación de una asamblea constituyente para la ciudad de México. Con los resultados imaginarios (aunque no antojadizos) del politólogo, de los 300 diputados de mayoría que habrá en San Lázaro a partir de septiembre, el PRI tendrá 114, el PAN 75, el PRD 54, el Verde 30 y Morena 27.
Entre éstos, de acuerdo con las reglas de la proporcionalidad, se distribuirán los 200 plurinominales. ¿Cómo? A razón de 40 por cada una de las cinco circunscripciones en que está dividido el mapa electoral del país. ¿En qué consiste esa división?
La primera circunscripción, con cabecera en Guadalajara, comprende los estados de Jalisco, las dos Baja Californias, Sonora, Chihuahua, Durango, Sinaloa y Nayarit. Ojo a este dato. En Jalisco, Movimiento Ciudadano puede derrotar al PRI en Guadalajara y sus alrededores. En las demás entidades se mantendrán el binomio PRI-PAN. Digamos que esos dos partidos se quedarán con la mayoría de los 40 pluris, pero MC puede darles problemas.
La segunda circunscripción, tiene cabecera en Monterrey y comprende los estados del gas shale y del fracking: Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, San Luis Potosí, así como el mocho Guanajuato y el pobre Zacatecas.
La tercera, con capital en Xalapa, se extiende por la franja petrolera de Veracruz, Tabasco y Campeche, así como por los estados con mayor población indígena, Oaxaca, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo. La cuarta, con capital en el DF, ocupa la ciudad de México, Puebla, Morelos, Guerrero y Tlaxcala. Y la quinta, con capital en Toluca, abarca el Edomex, Michoacán, Colima e Hidalgo.
Es de esperarse que a pesar de la alianza PRI-PAN-PRD-Verde-INE, sea en la tercera y cuarta circunscripciones donde Morena obtendrá, gracias al DF, Tabasco, Campeche, Veracruz, Oaxaca y Guerrero, el mayor número de plurinominales. ¿Y qué carajos me importa?, se dirá el exasperado lector si acaso llegó hasta aquí.
Primero: no votar no sirve para nada, excepto para ayudar a los partidos grandes, incluso al fraudulento Verde que debe perder su registro, y al jovencísimo pero pujante Morena. Segundo: como el anulismo será, desde luego, muy inferior al 50 por ciento imaginado por el politólogo, las rebanadas del pastel para los partidos no serán el doble de grandes, sino bastante menos expandidas.
En la elección intermedia de 2009, los votos anulados y los votos para candidatos sin registro, o sea, los votos echados a la basura, fueron un millón 900 mil, cifra equivalente a 5.6%. El pastel de los votos válidos se achicó muy poquito, pero los partidos aumentaron su votación real así: 2% el PAN, 2.7% el PRI, 0.9% el PRD, 0.9% el PT, 0.5% el Verde, 0.1% Movimiento Ciudadano y 0.3 Nueva Alianza.
¿A quién castigaste anulando tu voto? A ti. ¿A quién beneficiaste? Al PRIAN, a los Chuchos, a Dandy Delgado, a Beto Canalla, al Niño Verde, a Elba Estiércol. Éstas son algunas ideas que bien vale la pena debatir durante los días venideros.

Sobre Polemón y la censura

La @revistapolemón nació a principios de marzo y, tras su aparición en público, ocupó el lugar 4 millones 400 mil, en todo el mundo, por número de visitas. A finales de abril ya estaba en el sitio 2 millones 48 mil. La semana pasada había ascendido al sitio un millón 999 mil. De acuerdo con nuestro web manager, el miércoles por la noche, sufrió “un ataque sin precedentes”, según la empresa que hospeda nuestro sitio.
Polemón Censura
En tan corto plazo Polemón difundió urbi et orbe la tragedia de las fosas de Iguala, pulverizó la “verdad histórica” de Murillo Karam, puso en serio predicamento las falacias de la Operación Jalisco, dio a conocer que la Policía Federal tiene una “división de actividades encubiertas e infiltración” para desaparecer disidentes y sembrar “anarquistas” en las marchas del DF.
La debilidad, y la furia histérica de Peña Nieto, es tan notoria, que Polemón dejó de existir. Pero volverá, no lo duden, y muy pronto. Cada vez que nos tiren nos volveremos a poner de pie. Mientras tanto, busquen el espejo de Polemón en Facebook y apoyen esta cuenta de tuiter, donde estoy, como siempre, a sus órdenes: @Desfiladero132

miércoles, 6 de mayo de 2015

Seflie... Periodismo muerto en Veracruz

Van 12....

Mar de fondo en Operación Jalisco

Mar de fondo en Operación Jalisco 

Por: Jaime Avilés (@Desfiladero132)

5 de mayo de 2015. Había una vez un helicóptero militar lleno de soldados y policías federales, que cierto día volaba tranquilamente sobre una zona rural del estado de Jalisco, a 240 kilómetros de Guadalajara, cuando de repente, zaz, vio la polvareda que levantaba un convoy de camionetas en una brecha y descendió a 30 metros de altitud sobre el nivel del suelo como una águila pescadora en pos de una sardinita.
Las camionetas iban con las luces apagadas porque ya estaba amaneciendo y, según testimonios, estaban repletas de hombres armados hasta los dientes. Algunas incluso iban con las puertas abiertas. Los militares comenzaron a tirarles pero, de repente, zaz, un cohete disparado desde el convoy pegó en la cola del helicóptero y lo derribó como una paloma, cosa que nadie niega: hay evidencias.
Más adelante, cerca de un pueblo llamado Villa Purificación, las camionetas quedaron abandonadas, incluso con armas adentro. ¿Para dónde huyeron quienes las ocupaban? Sólo ellos lo saben. Tres horas más tarde, en Guadalajara y 31 municipios más de Jalisco, en forma sorpresiva, unos 500 paramilitares empezaron a despojar de sus vehículos a traileros y automovilistas, para prenderles fuego y bloquear numerosas carreteras.
¿Qué no encaja en esta historia, que desató el miedo generalizado, causó pérdidas de vidas humanas y daños materiales no cuantificados aún? En una palabra: nada. Sí, nada parece tener lógica en esto que ampulosamente se anunció como “Operación Jalisco” y resultó un desastre.
¿El helicóptero militar derribado andaba paseando al amanecer del viernes primero de mayo en una acción de simple rutina o cumplía una misión concreta? ¿Atacó el convoy de camionetas por órdenes externas o fue una iniciativa espontánea de sus tripulantes?
Desde la Presidencia de la República se presuma constantemente el crecimiento de efectivos del ejército mexicano y de equipamiento bélico.
Desde la Presidencia de la República se presuma constantemente el crecimiento de efectivos
 del ejército mexicano y de equipamiento bélico.

Según se supo y se dijo ese mismo día en todos lados, menos en las instancias de “seguridad” federal, el gobierno de Peña Nieto había mantenido en el secreto más grande su “plan” para detener a Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, jefe del cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Suponiendo que esa madrugada hubiese puesto en marcha una estrategia contra el capo, que según el número más reciente de Proceso no es el jefe sino el número dos de CJNG, ¿por qué no había un cerco militar en torno de la zona rural donde estaba el Mencho? Si el helicóptero ya lo tenía en la mira, ¿por qué el alto mando no le ordenó que lo siguiera a prudente altura y reportara su ubicación constantemente, mientras se desplazaban las tropas terrestres para sitiarlo?
Si para no poner en riesgo a las tropas terrestres el alto mando decidió acabar con el Mencho en un ataque aéreo, ¿por qué no acudieron más helicópteros para apoyar al que había detectado el objetivo? ¿Qué temían los señores del alto mando o los militares librados a su propia suerte en el helicóptero? ¿Que el Mencho y sus camionetas desaparecieran como topos en los hoyos del campo?
Si en ocasiones anteriores, los intentos fallidos para detener al Mencho provocaron bloqueos de carreteras, ¿por qué la mañana del primero de mayo el alto mando no tomó precauciones para evitar lo que finalmente fue la repetición, a escala mayor, de un modus operandi bien conocido?
¿Es tan endeble el aparato de seguridad del Estado que mil hombres pueden desquiciar en minutos la segunda ciudad más importante del país, así como así? Un video obtenido por Polemón ilustra cuán fácil fue quemar una sucursal de Banorte en Puerto Vallarta. Tres camionetas se estacionan frente al banco, unos tipos lo rocían de gasolina, arrojan un cerillo y se van.
Una pregunta recurrente en redes sociales: ¿por qué no había policías estatales, federales, gendarmes, soldados o marinos en ninguna parte? ¿El alto mando acuarteló a las fuerzas de seguridad y dejó indefensa a la población? ¿Por qué? ¿Para qué?
Pregunta finalísima. ¿La verdadera Operación Jalisco corrió a cargo del Cártel Jalisco Nueva Generación y el gobierno de Enrique Peña Nieto actuó como simple comparsa para crear terror, terror de Estado?
Mar de fondo –si entendí bien– es el fenómeno que se produce cuando en una región del océano, muy alejada de la costa, el viento provoca un sistema de olas, conocido como “oleaje”, que se estrella con la tierra firme sin que lo impulsen los vientos locales, imperantes, digamos, en las bahías cercanas a las playas.
Durante estos días, en algún punto del Pacífico de cuyo nombre nadie tiene idea, se formó un oleaje que azota las costas de Guerrero y está ocasionando graves daños. Contrario a lo que se cree, el mar de fondo no proviene de los negros abismos del océano sino de la superficie.
La gente, sin embargo, está acostumbrada a decir “mar de fondo” para referirse a asuntos políticos turbios y los periodistas, explica Umberto Eco-eco-eco-eco, en su libro más reciente –Número Cero, editorial Lumen, México, 2015– debemos respetar esos lugares comunes.
Pero si nos atenemos a la definición científica del fenómeno, el mar de fondo que detonó el caos en Jalisco el primero de mayo, bien pudo haber sido engendrado en Los Pinos, donde a la luz del más elemental de los análisis, la mala planificación, el show mediático y el terror lograron su propósito: amedrentar a los habitantes de una ciudad, la segunda más importante de México, que el PRI bien puede perder el 7 de junio.
Imagen de un bloqueo en Jalisco el pasado primero de mayo.
Imagen de un bloqueo en Jalisco el pasado primero de mayo.

Mar de fondo, en el sentido clásico, es la violencia que está cobrando vidas de militantes de Morena en distintos lugares, ayer en Comalcalco, Tabasco, anteayer en el estado de Oaxaca, por ejemplo, o la guerra declaradamente abierta por el regente Miguel Ángel Mancera y los mafiosos del PRD en delegaciones como Tlalpan, Coyoacán, Iztapalapa y Cuauhtémoc, donde pueden ganar los candidatos del partido que encabeza Andrés Manuel López Obrador.
Abominado por la mayoría de los mexicanos, el PRI –sus cuatro sectores (PAN, PRD, Verde y Panal), sus tilingos del INE, las televisoras, las almorranas podridas como Ricardo Alemán, Pablo Hiriart, Ciro Gómez Leyva y demás columnistas al servicio del cártel de Los Pinos–, han hecho todo lo que está a su alcance para que el primero de junio vote el menor número de personas.
No contento con promover el abstencionismo bajo la fórmula “todos son iguales”, que repiten el EZLN, Sicilia y demás colaboradores objetivos del régimen que lo defienden desde el ultraísmo –ratificando lo que decía Reyes Heroles: todo lo que resiste apoya–, el PRI tiene preparado para el 7 de junio un México-Brasil, millones de pesos en despensas, un ejército de acarreables vendedores de votos y muchos recursos más, pero nada le basta para sentirse tranquilo.
De ahí que la violencia contra Morena, el miedo sembrado en Guerrero, los candidatos y militantes que pierden la vida en todas partes y la Operación Jalisco, a cargo del cártel Nueva Generación en contra de Enrique Alfaro y Movimiento Ciudadano, forman un mar de fondo que proviene de Los Pinos, seguramente debido a los vientos del norte que soplan desde la Casa Blanca, a saber si la de Las Lomas, o la de Washington DC, o desde ambas.


viernes, 1 de mayo de 2015

Sedesol y Marcelo Montiel: ¿para quién son los 500 millones?

Sedesol y Marcelo Montiel: ¿para quién son los 500 millones? 

  Objetivo: inflar al cachorro de Fidel  * “No te preocupes mapache”  * Conflicto en Morena  * Nahle secuestra las estructuras de los operadores pejistas  * García Alonso y el padrón del IFE  * Afiliaba migrantes  * CETIS 79: negocio de 7 millones anuales  * Evaristo y sus cómplices  * Solalinde no se doblega

En 2012, Marcelo Montiel tenía tres razones para pervertir, usar y lucrar con los programas sociales federales: su candidato era Joaquín Caballero Rosiñol, recuperar la alcaldía de Coatzacoalcos y detentar mil millones de presupuesto anual. Ahora no. Ahora es por el PRI. Y por el hijo de Fidel Herrera Beltrán.
Lo acusa el senador Alejandro Encinas Rodríguez de malversar 500 millones de pesos, manipular los programas de la Secretaría de Desarrollo Social federal y sacar ventaja electoral para los candidatos del PRI. O sea, la reedición de los “Ladrones de Elecciones”.
Dice Marcelo Montiel que no. Se revuelca, brinca y salta para librarse de culpa. Refuta las imputaciones. Resume su defensa en que todo fue un montaje, una telenovela de mala producción y que él, como cualquier hijo del PRI, está limpio de lodo y ajeno a la corrupción.
Su perorata va en el sentido de que al senador Encinas le tomaron el pelo, le filtraron datos erróneos, le vendieron una historia inverosímil, plagada de absurdos y que al final la verdad se va a imponer.
Encinas dice que le llegó una memoria USB. Contiene información y 623 documentos y videos en que se acredita que el señor Marcelo Montiel, delegado de Sedesol federal en Veracruz, ha usado los programas sociales para canjearlos por votos, para orquestar y ejecutar un fraude electoral.
Sacudido, cimbrado, Marcelo Montiel se ha vuelto famoso. Ya no se habla del ex alcalde como el genio al que se le ocurrió construir un túnel sumergido bajo el río Coatzacoalcos para comunicar a esta cabecera municipal con la cosmopolita urbe llamada Villa Allende. No se cita su nombre porque quiso construir una réplica del Cristo del Corcovado, también en villa Allende, y ahí dejó, a medias, los trabajos, oxidada la estructura, en pedazos y a ras de tierra la figura de Jesucristo.
Ahora es famoso porque en la Cámara de Diputados le han dado con todo los diputados de izquierda y derecha. Acusan de mapaches a la titular de Sedesol, Rosario Robles Berlanga, y al mismo Marcelo Montiel, y piden que cuando menos la ex perredista renuncie, pues ya son dos episodios en que se ve involucrada.
“No te preocupes, Rosario”, le dijo en 2013 el presidente Enrique Peña Nieto, cuando el PAN destapó la cloaca, exhibió audios y videos, pilló en plena faena, planeando cómo robarse las elecciones, a lo más selecto del fidelismo y el duartismo, mapaches todos, ladrones sin vergüenza, Manzur, Pablo Anaya, Zarrabal, y su célebre pandilla.
“No te preocupes, Rosario”, le dijo el cómplice Peña Nieto en un mensaje de impunidad cuando la evidencia dejaba en claro que el regreso del PRI a Los Pinos no fue para que la justicia y la decencia marcaran la ruta a seguir.
“No te preocupes, mapache”, es la voz que espera escuchar Marcelo Montiel, atapado en una acusación que ya está en la Procuraduría General de la República, en la Fiscalía Especializada Para la Atención de Delitos Electorales, en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Marcelo Montiel refuta y disuade. No tendría a quién beneficiar con el robo de los programas sociales y el uso de los recursos de Sedesol, los 500 millones de pesos, pues su gallo para la diputación federal por el distrito de Coatzacoalcos, Víctor Rodríguez Gallegos, su mapache de cabecera, fue vetado por el gobernador Javier Duarte.
Pero su problema es de credibilidad. Marcelo Montiel ha usado siempre los programas sociales para alterar el ritmo de las elecciones. Lo hizo como alcalde de Coatzacoalcos para ser diputado local en 2004. Lo repitió en 2007 para volver a la alcaldía. Lo implementó en 2010 para convertir a Marco César Theurel Cotero —“Te rompo tu puta madre”— en presidente municipal. Lo aplicó en 2012 para hacer de Joaquín Caballero Rosiñol diputado federal. Y lo volvió a hacer en 2013 para llevar a Joaquín de nuevo a la alcaldía.
¿Quiénes son los beneficiarios del uso de los recursos y programas de Sedesol en Veracruz, los 500 millones de pesos de los que habla el senador Alejandro Encinas?
La estrategia proviene de Los Pinos. Peña Nieto requiere de mayoría en la Cámara de Diputados para consolidar sus reformas estructurales. De lo contrario en 2015 terminaría el proyecto peñista.
Veracruz aporta 21 diputados, casi el 10 por ciento de los legisladores de mayoría. Sean fidelistas o duartistas, alemanistas o beltronistas, petroleros o campesinos, todos aportan para el proyecto del presidente.
Sedesol y sus 500 millones sirven para impulsar a los hijos políticos de Fidel Herrera y a los cómplices de Javier Duarte. A ello se suman los diputados plurinominales, priístas y del Partido Verde, cuyo número varía en función de los votos alcanzados.
Dice Sergio Rodríguez, ex líder estatal del PRD, empleado de Javier Duarte en su gobierno, perredista rojo, ahora en plan rebelde, que los 500 millones son para los fidelistas y para el cachorro de Fidel Herrera, Javier Herrera Borunda, candidato a diputado federal plurinominal del Partido Verde.
“Les quitaron a los jornaleros agrícolas, les quitaron los cheques de aquellos que tienen proyectos productivos sociales y le han quitado igual su dinero a quienes han solicitado obras de la SEDESOL, pero hoy el interés general es desviar recursos para que el Partido Verde tenga votación y en la tercer circunscripción entre Javier Herrera Borunda, hijo del ex gobernador Fidel Herrera”, señaló Sergio Rodríguez, según reseña del portal Al Calor Político.
“Creo que queda muy claro quién generó a todos estos políticos que son candidatos. Por eso están pintando de verde el Estado, por eso se ve a Carolina Gudiño, a Erick Lagos, al de Tuxpan, al de San Andrés, a Jorge Carvallo, a Silva Ramos, se les ve de verde porque el jefe de la campaña es Fidel Herrera Beltrán”, agregó.
Repudiado en Cosamaloapan, el feudo del fidelismo, Javier Herrera Borunda no halló ahí eco para ser candidato a diputado federal por el PRI. Apenas asomó, sintió la repulsa popular, el escarnio de los desposeídos, la crítica lacerante, el repudio total.
No lo quieren porque sea Javier Herrera Borunda, pues el joven nada le ha hecho a los veracruzanos. Lo detestan por su padre, por Fidel Herrera Beltrán que acabó con Veracruz, que dejó un boquete financiero, que endeudó como nadie a la entidad, que encabezó a la pandilla depredadora, una banda de corruptos que saquearon al estado, no en uno sino en dos sexenios y que hoy están a un paso de asaltar el Congreso federal.
De algo sirven los 500 millones de pesos. Apuntalan los votos para el priismo en los 21 distritos electorales de Veracruz y le aportan al Partido Verde, que es el satélite a modo del tricolor, los votos para incrementar el número de legisladores en la Cámara.
Ahí, en ese proyecto, va el hijo de Fidel...


TAMALIN, EL GABINETE DEL CACIQUE...

ANDRES RAMOS REYNO – PRESIDENTE Va por su segunda Administración en el Municipio, como  Pedro Garcés Marcial y Lerdo Ferrer; han gobe...