Villahermosa, Tab., 6 de agosto.
Al asistir a la instalación de la Comisión para el Desarrollo
Integral de la Región Sur-Sureste de la Conago, el mandatario estatal
también afirmó que esta zona del país será el nuevo motor económico de
la nación en las siguientes décadas.
En primer plano el gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, durante la reunión de la Conago
Pemex, un debate en los extremos
Forumenlinea
El poderoso Grupo
Financiero Banamex, columna vertebral junto con BBVA Bancomer del
oligopolio bancario, tiene demasiado claro, por algo será, que la
iniciativa de ley para la reforma energética que presenta hoy el titular
del Ejecutivo federal, “será similar a la panista”, implicará cambios
constitucionales y pide a los legisladores que en el debate que está
punto de empezar tengan “en mente las palabras de Manuel Payno”,
legislador, periodista y escritor quien dijo en el Congreso hace más de
un centenar de años: “Prudencia, experiencia, estadísticas y la
naturaleza y condiciones específicas de cada nación deben guiar a un
legislador”. Los consejos de uno de los grupos económicos
trasnacionales, aliados a los locales que son dueños de México por
encima de toda la institucionalidad republicana y democrática,
parecieran oportunos cuando el debate comienza, el extraparlamentario
que es tanto o más importante que las previsibles posturas inamovibles a
expresarse en las cámaras para sacar adelante el más decisivo proyecto
no sólo para Enrique Peña y el conjunto de gigantescos intereses que
representa, y la alianza histórica del denominado PRIAN, negociación y
consenso harto eficaz para producir y reproducir el rumbo nacional
impuesto en 1988, pero impensable sin el viraje de Miguel de la Madrid,
reseñado en su libro denominado Cambio de rumbo, expuesto detalladamente por él al Grupo María Cristina, ayer hizo nueve años.
Cuando lo que está en juego para todos los actores políticos, agentes económicos y sociales es tanto como el espacio sociopolítico que ocupan en el presente y cubrirán en el futuro, aparece como inevitable la muy temprana polarización de un debate que gira en los extremos de “traidores a la patria”, presumiblemente expresado por el general Lázaro Cárdenas frente a “quien entrega los recursos naturales nacionales a los extranjeros”, y su contraparte, la descalificación por “conservadores y dogmáticos” y otras lindezas de la intolerancia propagandística a quienes se oponen a cualquier reforma constitucional en materia energética. El despropósito llegó a lo grotesco cuando ayer Televisa puso a Eduardo Salazar y Esteban Arce a explicar y defender el proyecto reformador de Peña Nieto, aún desconocido por casi todos.
Si la batalla por ganar las mayorías para el proyecto energético del PRIAN (fórmula acuñada por Luis Sánchez Aguilar), que en el caso del blanquiazul incluye la distribución y venta de energía eléctrica por los particulares que ya generan el 40 por ciento de la electricidad que venden a la “Empresa de clase mundial” que tanto defendió Felipe Calderón, no rebasa las visión catastrofista de Pedro Joaquín, el dueño de gasolineras que no se apiada de que en todo caso es el resultado de dos sexenios en que su partido cogobernó (ANPRI); o César Camacho que anuncia la disposición de tomar las calles si es necesario para cumplir la encomienda de su jefe político en turno, pero sin obsequiar Rolex como lo hizo en el Congreso mexiquense cuando gobernó el estado (1995-99), en tal caso difícilmente armarán mayorías ciudadanas para su “proyecto modernizador”.
Y sembrarán más confusión que ganar adeptos las partes confrontadas, sobre todo con el manejo de la figura de Cárdenas del Río como impulsor de la inversión privada nacional y extranjera, sin molestarse en documentarlo, o su rechazo absoluto hasta sentenciar traición.
Supongo que nadie está satisfecho con la situación de la muy rentable paraestatal saqueada por la corrupción de contratistas, funcionarios, políticos y sindicalistas con nombres y apellidos; exprimida por gobiernos incapaces de molestar a los dueños de México cobrándoles las obligaciones fiscales.
Fuente original: www.forumenlinea.com
Cuando lo que está en juego para todos los actores políticos, agentes económicos y sociales es tanto como el espacio sociopolítico que ocupan en el presente y cubrirán en el futuro, aparece como inevitable la muy temprana polarización de un debate que gira en los extremos de “traidores a la patria”, presumiblemente expresado por el general Lázaro Cárdenas frente a “quien entrega los recursos naturales nacionales a los extranjeros”, y su contraparte, la descalificación por “conservadores y dogmáticos” y otras lindezas de la intolerancia propagandística a quienes se oponen a cualquier reforma constitucional en materia energética. El despropósito llegó a lo grotesco cuando ayer Televisa puso a Eduardo Salazar y Esteban Arce a explicar y defender el proyecto reformador de Peña Nieto, aún desconocido por casi todos.
Si la batalla por ganar las mayorías para el proyecto energético del PRIAN (fórmula acuñada por Luis Sánchez Aguilar), que en el caso del blanquiazul incluye la distribución y venta de energía eléctrica por los particulares que ya generan el 40 por ciento de la electricidad que venden a la “Empresa de clase mundial” que tanto defendió Felipe Calderón, no rebasa las visión catastrofista de Pedro Joaquín, el dueño de gasolineras que no se apiada de que en todo caso es el resultado de dos sexenios en que su partido cogobernó (ANPRI); o César Camacho que anuncia la disposición de tomar las calles si es necesario para cumplir la encomienda de su jefe político en turno, pero sin obsequiar Rolex como lo hizo en el Congreso mexiquense cuando gobernó el estado (1995-99), en tal caso difícilmente armarán mayorías ciudadanas para su “proyecto modernizador”.
Y sembrarán más confusión que ganar adeptos las partes confrontadas, sobre todo con el manejo de la figura de Cárdenas del Río como impulsor de la inversión privada nacional y extranjera, sin molestarse en documentarlo, o su rechazo absoluto hasta sentenciar traición.
Supongo que nadie está satisfecho con la situación de la muy rentable paraestatal saqueada por la corrupción de contratistas, funcionarios, políticos y sindicalistas con nombres y apellidos; exprimida por gobiernos incapaces de molestar a los dueños de México cobrándoles las obligaciones fiscales.
Fuente original: www.forumenlinea.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario